Mi madre Mary Wronko, padece de demencia vascular. Esta fue diagnosticada en junio del 2009. El pronóstico del consultor cuando le dio la noticia a la familia, hizo que mi mamá redacte su testamento y encuentre un muy buen hogar para ancianos, ya que no existe ningún medicamento de prescripción para tal condición y los siguientes seis meses fueron un infierno viviente. No sé en cual momento ocurrió, pero mamá padecía del síndrome de ocaso, el cual formaba parte de la demencia que habían dejado los mini derrames. Seis meses más tarde, fuimos bendecidos cuando conocí a un consultor que, no solo estaba capacitado en medicina clínica, sino que tenía una gran riqueza de conocimientos acerca de los medicamentos herbales. Él me aconsejó que probara el tratamiento con NeuroAiD™ y mamá comenzó a ingerir directamente el NeuroAiD™.
Mamá no tenía ningún defecto físico, solamente padecía de una pérdida de la memoria. En el 2010, mi mamá se cayó y rompió la pierna en Tenerife. Tuvimos que permanecer allí otras cuatro semanas más y no teníamos suficiente NeuroAiD™ durante ese período. Pude observar un muy rápido deterioro en la condición de mi mamá. Cuando regresamos al Reino Unido, compré más NeuroAiD™ y en un lapso de dos semanas fue como ver una flor marchita volver a florecer. Mamá simplemente floreció, y yo sé que sin el NeuroAiD™, mamá definitivamente no sería la misma persona que es hoy en día. El NeuroAiD™ definitivamente está contribuyendo a que mamá siga siendo capaz de reconocer a su familia. Ella no está en un hogar para ancianos, sino en su propia casa. Yo vivo con ella y contamos con la ayuda de otros cuidadores. Esta fue una de esas cosas acerca de la demencia vascular que nunca había escuchado y yo supe que cuando hablaba con la gente acerca del NeuroAiD™ en el principio antes de que lo hubieran comprado, ellos fueron honestos y me dijeron que realmente no habían utilizado el NeuroAiD™ para tratar la demencia vascular, pero debido a la investigación que había realizado el consultor de mi mamá con el NeuroAiD™, yo sentía que podría ayudarla.
He sido testigo de la condición en la que se encontraba mi madre antes de que tomara el NeuroAiD™, y luego cuando dejó de tomar NeuroAiD™ y, a continuación, cuando ella volvió a utilizarlo y no tengo la menor duda acerca de que el NeuroAiD™ definitivamente contribuye a la mejor calidad de vida de mi madre.
*Las imágenes no son de pacientes reales
